Mujer Canibal

La Mujer Canibal se originó a partir de una narrativa doméstica de la esposa que mientras preparaba carne, se alimenta a sí misma pero no ofrece nada a los perros de su marido. La poderosa medicina de los perros (orenda) hace que ella se corte el dedo en lugar de la carne. Ella chupa la sangre para detener el sangrado y le gusta tanto el sabor de la sangre que continúa cortando sus dedos y chupando la sangre de cada uno. No satisfecha, ella también corta su carne. Aún no satisfecha, mata y se come a su pequeño hijo.

Los perros advierten al marido antes de su regreso y encuentran refugio con dos ancianos que adoptan al hombre como propio. Debido a la lealtad de los perros, el afecto hacia los perros recibe un gran poder. Los perros saben todo lo que se dice pero carecen del poder del habla. La crueldad con los perros causa daño recíproco.